viernes, 31 de julio de 2009

CRONICA DE LA GIRA VI

CRONICAS DE LA GIRA

“Recorriendo las Huellas de los Pueblos”

NRO. SEIS

Republica de Perú

CRÓNICAS DE LA GIRA VI


Ciudad de Loja, Republica de Ecuador, 29 de Julio de 2009.


Aquí yirando por los caminos maravillosos de la América nuestra; tratando de plasmar en palabras los acontecimientos que hemos vivido. Difícil muy difícil se nos hace, transcribir tales sentimientos generados en los kilómetros recorridos y a las tantas maravillosas personas que se nos han hermanado a través de la cultura y el arte de los títeres.

ENTRANDO EN LA REPUBLICA DEL PERU

En la crónica anterior les habíamos contado que salimos con Giovanna y Hugo de Bolivia, ellos como tales hermanos nuestros nos acompañaron hasta cruzar la frontera. Querían estar seguros y tranquilos; cuidarnos a los Zondas la gran familia Chambi haciendo fuerza para que sigamos repartiendo sonrisas con nuestro arte.

Hoy estando con el compañero Ruddy recordamos con Nicolás cuando la Giobi nos decía: ¡Sigan, sigan!. La verdad que allí en la ciudad del Alto en Bolivia se nos hacia difícil el hecho de seguir, las cuestiones de los cruces de frontera los interminables papeles y boludeces que te piden al cruzar una barrera donde de un lado hay una bandera de unos colores y del otro otra.

¿Acaso no somos todos hermanos?

Pero bueno son las parafernalias de los que nos quieren dominar para así tenernos bien separaditos, inventos nada mas. Hoy por lo recorrido podemos decir que la hermandad los une a todos y cada unos de los Latinoamericanos. Desde la sangre, desde los pensamientos, desde nuestra historia, y desde nuestras luchas.

Luchas que son las mismas, con muchos muertos de nombres distintos, pero de iguales ideales de liverta.

Llegamos a la Ciudad de Puno, en sus generalidades mismas costumbres que los hombres y mujeres andinas de Bolivia. Solo pasamos la noche en una ciudad oscura, tranquila y ya sin nuestros ángeles protectores. Solo nosotros dos, allí abrigando con una frazada y varios otros harapos el motorcito de la fantástica antorcha, para que no se nos congele por el terrible frió.

Y así continuamos tranquilos, inundados de tanto amor recibido de la bella y magnifica Bolivia.

Temprano salimos. ¡Arranco la estanciera! Contentos salimos, pero también un poco tristes y con melancolía en nuestros latidos.

Olvido argentino, nos llevamos la frazada del hotel, bueno con tanta fama de ladrones que tienen los Peruanos, nos adelantamos a los acontecimientos. ¿Qué paso? No se, vino la frazada con nosotros.

Y así fue, teníamos idea de que solo Perú seria un país de paso, habíamos estado mucho tiempo en Bolivia, así que solo queríamos llegar a la Ciudad de Lima, donde el colectivo Anaraco nos estaba esperando. Por eso y por las cuestiones financieras no podíamos quedarnos en otros lados.

Derecho, de fresa como dicen los hermanos Peruanos, derecho seguimos. Pasamos por Arequipa, Camana, Nazca, y otras tantas ciudades. En una parte del Camino la ruta se dividía en dos. Una hacia “Cusco” y la otra “Lima”.

Allí le preguntamos a la Fantástica Antorcha: ¿Dónde tú quieres ir, amiga compañera, tú que nos llevas y nos cobijas en tus entrañas? ¿Dónde quieres ir?



Y en el silencio inmenso de tan impactantes paisajes desolados, una voz calida, dulce, tranquila, armoniosa y equilibrada, salio desde la tierra misma, reboto por las montañas y se adentro en nuestros corazones.

Parecía la voz de una niña.
Una madre.
Una compañera.
Una amante.
Joven pero con mucha experiencia.

¡Muchachos de los títeres del Zonda!, aquí yo, soy la voz de la Antorcha. Ches, como les dicen aquí, pónganse las pilas, tengo frió y se esta viniendo el invierno.

La verdad que si me quieren, no me lleven hacia los andes, no me lleven hacia el frió. Me congelo, se me hace hielo el agua, y no puedo, no puedo. No llego.

Si me quieren ustedes mis amigos, no me lleven a los andes…

Y así fue que decidimos no ir al Cusco, nos fuimos a la calidez de otro clima.
Te queremos Fantástica Antorcha, te queremos vieja viajera.


ESTADIA EN LA CIUDAD DE LIMA

La ciudad de los reyes, Lima la que el sol no sale, la que la niebla esta en cada momento, la de los balcones, la de los señores Incas, la de la historia. Lima la que tiene los restos del conquistador y asesino de Pizarro. Lima la del arte, la de los suburbios, la de los antros, la de los mercados.(la del Averno, no olviden de ir por allí)


Simplemente Lima, la maravillosa, que en cada momento y en cada paso que das, te impregna de historias, de momentos eternos y magníficos.

Llegamos a la ciudad y fuimos a parar a la casa del Pancho, el Francisco de Comas, nos recibio increíblemente bien, coordinamos unas funciones en un colegio, el Fe y alegría de Comas, barrio año nuevo.


Lo que llaman un asentamiento humano, o una villa marginal en Argentina. Casas de pobres, y gentes humildes. Invasores de las tierras, ocupas de lo que les pertenece, como en todos lados.




¿Quiénes nos podían recibir? Sino de mejor manera. ¿Quiénes nos podían dar una mano? Sino fueran ellos, los iguales a nosotros.

Junto a una bella monja tercermundista maravillosa, que nos enamoró los pensamientos y nos dignifico los espíritus con su anillo de coco, su elección por los pobres, y juntos a ellos. Viviéndola día a día. Nos abrió la puerta de su escuela con un señor Director en toda su Ley para que hagamos funciones.

Y las hicimos. Once funciones cuatro por día, nos cansamos físicamente, pero fueron muy gratificantes. En una un niño de unos once años, no vidente, fue a presenciar la función y la disfruto increíblemente.

Otra, un jovencillo de unos diez años, nos comenzó a hacer varias preguntas pero no parecían de un niño, ni siquiera un periodista nos la izo de tal manera hasta ahora, tantas preguntas y tan inteligentes, sobre nosotros a nivel personal, y sobre el teatro de títeres. Al termino de la charla nos abraza a los dos y nos dice: ¡Nicolás, Sebastián! Cuando sea grande quiero ser un artista como ustedes.

Nos dio un beso y se fue muy feliz. La Monjita estaba observando desde lejos muy atentamente, al ver que el niño que se alejo, ella se acerco hacia nosotros y no dice: ese niño con el que ustedes estaban, es autista.

ENCUENTRO CON JESUS, CHARITO, PAOLA Y RUDDY

Dios, la Virgen, Buda, los profetas, los santos, Mahoma, que sabemos nosotros, las estrellas, los planetas, las energías del Universo. No lo sabemos y ni tampoco nos rompemos los marotes en descubrirlo, solo nos dejamos llevar por la magia de la vida que nos acompaña y la sentimos con olor a rosas, claveles, clisantelmos.

Nos cruzamos con las vidas de otras gentes y desde allí las nuestras ya no son iguales, nos acarician el corazón y nuestros latidos suenan más fuertes y acompañados. Así fue con Ruddy y su familia.
La generadora de luz, la Charo compañera inigualable, madre, amiga, pata como dicen los Peruanos, Gambas como decimos los argentinos, una mujer de fierro, luchadora, una capa una maestra, alli a sus brazos fuimos a parar, a conocer, a compartir.

El Jesús un pan de Dios, una palmada en el hombro, un hombre bueno, otro luchador, un creyente de la gente, un trabajador con ejemplos, una pureza que reflejan sus ojos, sus manos, su mirada, sus palabras simples. Su humildad infinita y su amor florecido desde sus entrañas mismas.

La Paola, la hermosa Paola, con sus músicas, sus energías tan salpicantes y su lengua igualmente tan afilada. Rebeldía de años, sus cantos y alaridos a los llamados “el Rancho esta servido”. ¿Dónde estarán tus pensamientos y sueños en estos momentos?
Tamos cuidándonos con tu hermano, quédate tranquila.


Y el Ruddy…
Palabra mayor en titiritero, que ya es parte de nuestra gira y recorrido por las huellas de los pueblos.

Allí nos recibieron, no teníamos ni ganas de salir de esa casa, nos quedábamos todo el día en la Jato, trabajando, escribiendo, construyendo billeteras, títeres. Creando música, compartiendo. Dándole curso a los sueños.

SANTIFICACION DE LA ELSA Y KASANDRA

En una crónica pasada, les habíamos contado que nos dijeron que nuestras marionetas estaban endemoniadas, eso fue en la plaza de la Ciudad de Cochabamba, en la Republica de Bolivia.



Bueno, algo debíamos hacer. Entonces se nos apareció el Jesús del Paradero Gallinazo en Puente Piedra a las afueras de Lima, y nos invito a realizar una función en una iglesia.

Nosotros fuimos, pensando que la presentación seria en la calle, pero bueno no fue así, porque había muchos niños, el día estaba feo, y la calle seria un riesgo para ellos. ¿Pues entonces donde nos presentamos?


Dentro de una iglesia, con sus santos, con sus velas y todas sus cruces. Y salio nomás, la Bartolina, el Evaristo.
¿y quien mas? El mismísimo diablo. El títere diablo de los Zonda, allí haciendo de las suyas frente al cura párroco y los feligreses; en la mismísima iglesia.

Como en una no se pudo, se siguió en otra. Les gusto tanto la presentación que no valió si no más que presentarnos luego en conmemoración de una fiesta patronal.

Así es pues, la gente quedo maravillada de los títeres y por eso nos invitaron unas monjitas ecuatorianas y el mismísimo cura párroco, hacer otra presentación en la fiesta de San Pedro de Caraballyo. Festejo y garrote, aparecieron los Biyuyos cantando, el Panadero y el Diablo de la Polilla.


Y claro no podían no aparecer.
Las impactantes, las sensuales, las que le dejan boquiabierta a los señores y también sin limitaciones y cerramientos sexuales a las señoras, o las envidias de sus caderas y movimientos corporales.

Nuestras Elsa y Kasandra. Las bailarinas árabes y su danza mágica.
Tan mágica, pero tan mágica que el santito articulado del año de don Cristóbal Colon, movió su cuello y lloro por no ser marioneta de hilo.

Si no saben, milagro decía le gente, milagro. Ma que milagro si uno sabe mucho de esto, ese acontecimiento solo era cosa de muñecos.

BORRACHERA EN LA PLAZA DEL LIBERTADOR

Nosotros somos titiriteros, y los titiriteros no son gente sana, ni mentalmente y menos físicamente. Todos tenemos nuestros vicios, algunos sexuales, otros prohibidos, otros no tan prohibidos, y el alcohol es un vicio de los titiriteros también.

Asi, pe.

Ningún titiritero esta exento de borrachera, el titiritero que no se emborracha, no es titiritero, no capta las imágenes, no transmite sus sentimientos, no ve la calle desde el lugar mas intenso.

Es simplemente un movedor de objetos.
El titiritero tiene la obligación de emborracharce, quedar tirado en un banco de una plaza, por lo menos una vez en cada país donde va.



Y nosotros no somos la excepción, cumplimos al pie la regla fundamental del maestro Javier Villafañe, siempre y cuando haya un vinito. Bueno esta vez no fue así, sino mas bien el Pisco Peruano, que no podíamos irnos del Perú sin antes probarlo.

Uno, otro, y otro, y otro, y cinco veces otros. Con los amigos de Tarbol, el Josmy, Ruddy. No voy a explayarme en detalles, pero si le voy a decir que estuvo bárbaro, la resaca nos duro unos tres días.

Imagínense.



EL PÚBLICO MÁS COMPLICADO Y LA SATIFACCION MAS HERMOSA

Hay veces que la gente se expresa muy bien, se saca las etiquetas y se viste de lo que realmente es, digamos se desnuda en su mas bella naturaleza. Y cuando va a ver un espectáculo es mas interesante. Por un lado se transforma en exigente y por el otro lado lo que le va le va y lo que no lo abuchea.

Y esa fue una de esas presentaciones, nos habían adelantado en ese lugar la gente es bien complicada, no todos los artistas se animan a ese publico.

Nosotros dijimos, va que, si ya tenemos calle, tenemos experiencia, tenemos camino recorrido, no nos importa vamos nomás.

El parque universitario, un lugar en el centro de Lima, copado por migrantes, un lugar de encuentro bien popular, acostumbrado a los cómicos ambulantes, los cantores populares y a dar una gorra de céntimos también.

Le gusta aplaude.
No le gusta te quema como los inquisidores de Lima.

Llegamos en el marco de un festival llamado FIETPO, todo bien, pero la compañía anterior había desistido no se pudo presentar, por cuestiones técnicas.

Entonces pusimos el pecho de los títeres nuestros..
Entre silbatinas y putiadas.

¿Para cuando?
¡Pongan música y saquen a esos gringos! (Nos llamaban, eso nos jodia terriblemente)

Antes de comenzar salimos del retablo y comentamos quienes somos, pero esta vez dijimos no, no vamos a cuidarnos de los botellazos. Mandemos la función nomás.

Así fue, y de repente se creo el clima, los gritos cesaron, los silbidos no se escucharon mas, la armonía estaba presente.

Risas y silencios nos decían por entre el retablo, vamos bien, bien.
Hasta que terminamos con el Ladrón de Flores. Y los aplausos nos invadieron, nos colmaron y el auditorio nos ovaciono.

Otra, otra, y no nos hicimos rogar, salio al compás de la música la Danza de Elsa y Kasandra y Jimmy.

La rompimos. Francisco el organizador nos decía: ¡Muchachos son muy buenos ustedes! ¡Son muy buenos!

Tuvimos nuestro momento de gloria, y nos recibimos en el teatro popular.
Gracias Panchito y familia por invitarnos al festival.

DESPEDIDA DE LA CIUDAD DE LIMA

Pensábamos solo pasar por Perú, pero no fue así ya teníamos que rajar se nos estaba cumpliendo la estadía en ese país. Dos meses y medio, ya debíamos afrontar la retirada y darle curso al adentramiento en Ecuador.
La antorcha si les contamos no nos van a creer donde estaba alojándose. Una carpintería, pero no era una carpintería común y corriente. Esta era la carpintería…

La señora carpintería.
¿Adivinen que construía?

No, muebles no nada que ver.
No, puertas no nada que ver.
No, mesas y sillas no nada que ver.

¿Se dan por vencidos y vencidas?
Y si, parece que no tienen imaginación, che

Ataúdes, si, si ataúdes. El señor carpintero nos decia que buen vehículo, para transportar cajoncitos, dos adentro y tres se pueden llevar tranquilamente afuera.

Conocimos todos los modelos. El ingles, el Linch, el Curvo. Todos, pero nos fuimos rajando.

Pero con compañía, y no necesariamente un muertito, sino mas bien un hermano el Ruddy se nos sumo a la gira, hasta donde el quiera será.

Bienvenida compañía de títeres la Polilla. Bienvenido Ruddy a la gira de estos locos titiriteros.

CAMINO A TRUJILLO, CHICLAYO Y PIURA

Esta gira nos lleva hacia muchos lugares nos hace aprender no solamente sobre las personas, nos humaniza mas, nos da mas herramientas en el camino. Sino también nos enseña un poco de mecánica.

La antorcha, salio con problemas, va llegamos a la Ciudad de Lima con pequeños problemas que pensábamos haberlos solucionado con un mecánico que vimos antes de partir. Pero no fue de esa manera.

Sigue con problemas, primero el filtró de combustible, le entraba aire, y fallaba, nos dejo unas siete veces en el camino, no nos arrancaba, no entendíamos nada. Ya le habíamos probado todo lo poco que sabíamos de mecánica.

El tema era que estábamos en el medio del desierto, pero siempre hay gente buena y solidaria, nos dieron una mano y así seguíamos, hasta que se paro y no quiso más.

¿Pero donde se paro la antorcha?
A unos metros de un teléfono de un S.O.S., sí, no se puede creer, eso si es un milagro, llamamos y nos enviaron una grúa. La arreglaron y seguimos. Dale que dale, que dale.

Y se vino la noche, las estrellas y en el medio de la nada estábamos nosotros.
Paramos ya esta bien, muchos kilómetros recorridos, pero que no podíamos contener nuestras aguas mas.

Y así seguimos, llegamos a Trujillo muy tarde David de Arte urbano nos fue a recibir a la una de la mañana a la plaza de armas, llegamos bien, y a descansar, muy bien, nos fue. Solo pudimos hacer algo de marionetas en la calle, por el tema de la Gripe todo cancelado, nos quedamos unos días y luego partimos hacia Chiclayo.

La casa del Señor de Sipan, increíble el lugar la gente. Habíamos coordinado unas funciones con la gente del Instituto Nacional de Cultura, y nos alojamos en la casa del Papa de Ruddy, buena onda.

Conocimos linda gente pero debíamos seguir, sino tendríamos multa para salir de la frontera. Muchos afectos en pocos días con Gladis y su hija, nos cuidaron mucho, y compartimos mucha charla vinito de por medio.


Salimos rumbo a Piura, una gran compañía nos recibió. Para nosotros fue muy importante, no hubiese sido así la sensación de afecto y energía que nos dieron los amigos de la Pequeña Compañía de Teatro.

Un cierre increíble de un país maravilloso.

El Director, un señor director, el Julio, una bella persona, una calidad de persona muy pocas veces vista, un hombre comprometido con el teatro desde un lugar fascinante, soñador, luchador.

Acompañado de un elenco mas que maravilloso, majestuoso, con una energía infinita, los muchachos como el les dice, mucha vitalidad, muchos sueños, nos colmaron de su esencia.


Salimos a la calle a festejar su séptimo aniversario, con sus zancos, con sus vestuarios, sus acrobacias, sus encantos, sus sonrisas.

La verdad que Perú hubiera sido otra sin no los hubiéramos conocido.
Una gran conexión, volveremos amigos, volveremos muchachos y muchachas de la Pequeña compañía.


Toda la mejor hermanos del arte, aquí nos tienen para lo que quieran.


CAMINO A ECUADOR

Temprano nomás y empujando la antorcha ya que su alternador no funcionaba, y no podíamos llevarlo a arreglar ya que los tiempos no nos dejaban. El motor debió permanecer siempre en funcionamiento durante esta travesía de unos 500 kilómetros.

Salimos, y le dimos ruta a la rutera. Tranquilos, tranquilos, le dimos. De repente la frontera, otra vez los papeles, las boludeces de un lado y del otro. Que esto no tiene sello, que el papel la fotocopia.

Quilombetes burocráticos.
mai

Prueba superada.
Estamos en el Ecuador, pero todavía nos faltaban unos 200 kilómetros de caminos muy sinuosos, hasta llegar a la ciudad de Loja donde nos estaban esperando.
Y le dimos nomás.

La antorcha una señora con mucha experiencia en acortar las distancias y Nicolás en el comando dándole a la manejada perfecto equipo.

Llegamos a Loja.

Llamamos a la Hermana Elsa, la monja que nos daría alojamiento. Pero antes debíamos hablar con ella para que nos encontremos y así nos indicara como llegar al Hogar así descansar.

¿Y que paso?


La antorchita se paró.
Poto calato quedamos en frente a la terminal de micros. No puede ser.
Hasta que llegaron las envidas de Dios.


La hermana superiora, con la Hermana Elsa, cuyo nombre religioso lleva a realizar comentarios, pero eso depende de cada uno de ustedes y no de nosotros. Aclaramos dijo Ramos.

La madre superiora, Conchita, dice: ¡Se murió!


Esta historia continuara.

¿Se producirá un milagro?
¿Resucitara la Antorcha?
¿Tendrán que colaborar ustedes realizando un depósito en la cuenta del banco Patagonia?

Esto y mucho más lo sabrán en la próxima crónica.

Abrazos y multicolores sonrisas.

Sebastián Berayra
Nicolas Martinasso
Titeres del Zonda

Ruddy Castillo
Titeres la Polilla